Ok ya vieron las fotos, ahora toca para mi escribir el relato que bien puede ser lo que paso pero tambien todo lo contrario. El sabado, contrario a toda costumbre mi mama descanso, asi que temprano me sali de la casa en busqueda de una aventura, asi que la primera parada fue la casa del chino (el dueño de la moto) mala suerte estaba dormido, de ahi con Ricardo, sin novedad no abren la puerta, de plano no fui con Edgar porque me dio tedio subir las escaleras para constatar que el o estaba dormido o de plano no estaba. De este modo regrese a casa solo para encontrar que el ambiente estaba crispado porque mi ama queria hacer una limpia del hogar y yo pues como no me puse de modo cause tremendo coraje a mi procer, decidi evadir las confrontaciones y probar suerte de nuevo, esta vez Fernando estaba ya listo para hacer y deshacer. Ambos sentiamos el estrago que causa el hambre y decidimos ir en busqueda de comida, aqui destaco que por estas fechas de fin de año y navidades la ciudad luce desierta y pues los lugares donde usualmente podemos adquirir alimentos, sea fondas, puestos de tacos o pequeños restaurantes permancen cerrados dejando a los huevones como nosotros a su suerte. Total que por fin desayunamos mariscos, y en la charla posterior lo convenci de largarnos a Vallarta.
Reconozco que no todo sali asi de facil, ya que tuvimos que enfrentar a la novia de Fer que se puso como fiera cuando le aviso que en vez de estar con ella se iba de aventura al mar conmigo, la escena fue de lo mas nefasta por lo candido del espectaculo, cosa que merece un punto y aparte.
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