Hoy en una de esas salidas en moto hacia lo recondito y obscuro de la mole urbana me encontre con una calle (que desconocia) donde estan listas para el servicio las putas. Unas eran bellas, otras voluptuosas otras marchitas unas mas decrepitas pero todas llevaban en la mirada la esperanza de recibir a los clientes (o no?).
La calle cuando se vive de ella es un lugar sordido y cruel, las putas arriesgan el pellejo cada noche en lo mas bajo y con gente que tiene costumbres y habitos de higiene diferentes a ellas por no hablar de el riesgo del maltrato y abuso psicologico, ya se oye en los refranes machistas (tratala como puta) o bien (es una puta en la cama)....
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